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Ya todos hemos escuchado que el ejercicio es bueno para la salud, pero a lo mejor no te han explicado la importancia de la construcción y mantenimiento de músculo a través del entrenamiento de fuerza o resistencia. Si tus entrenamientos se centran sólo en el ejercicio aeróbico, te estás perdiendo un gran beneficio a tu salud en general, presente y futura. Aumentar y mantener masa muscular ofrece muchos beneficios para todos. El entrenamiento de fuerza aumenta la masa muscular magra, lo que ayuda a tu cuerpo a quemar calorías más eficientemente y mejora tu calidad de vida.
En lo que tiene que ver con el metabolismo, la masa muscular es el “motor” de la máquina para quemar calorías. A medida que entrenas la fuerza y aumentas la masa muscular, construyes un motor más grande, más eficiente que quema más calorías y ayuda a perder peso. Cuanto más tonificado los músculos, más fácil es mantener tu peso. De hecho, cuanto mayor sea tu masa muscular, más calorías quemas cuando descansas. Por cada libra de músculo que tienes, tu cuerpo usa cerca de 50 calorías adicionales al día.
La gente pierde alrededor del 10% de su fuerza a los 50 años de edad, de acuerdo con el American College of Sports Medicine. En el momento en que llegas a tus 60 y 70 años, tu fuerza muscular se reduce en un 15% por década, y un 30% a partir de entonces. Sin embargo, los adultos mayores que realizan una actividad física adecuada y entrenamiento de resistencia pueden aumentar su fuerza hasta tres veces en dos o tres meses. El aumento de tu fuerza te ayudará a llevar un estilo de vida más activo impregnado de actividad espontánea.
Ganar músculo también ayuda a proteger las articulaciones de una lesión, de acuerdo con MayoClinic. A medida que envejeces, el equilibrio puede ser un problema que puede conducir a huesos fracturados de cadera y otras lesiones relacionadas con caídas. Los músculos más fuertes ayudan a mantener las articulaciones firmes. Esto puede ayudarte a llevar una vida más independiente a medida que envejeces.
El aumento de la masa muscular te hace más fuerte por lo que tendrás más resistencia al realizar actividades físicas. A medida que te vuelves más activo, tu calidad de vida probablemente mejorará. Los músculos más fuertes también contrarrestan los efectos secundarios de la debilidad de los músculos, lo que puede causar inestabilidad y dolor estructural. Los músculos fuertes y tonificados también mejoran tu apariencia, aumentan tu autoestima y te hacen sentir mejor en general.
Para adelgazar de manera inteligente, efectiva y permanente, es cuando bajamos los niveles de la grasa y casi nada del músculo y se alcanza – además de con una alimentación saludable – con una combinación de ejercicio cardiovascular (correr, bicicleta, nadar) y entrenamiento de fuerza (pesas). Mientras que haciendo cardio logramos elevar nuestra frecuencia cardiaca y quemar calorías, el entrenamiento de fuerza trae consigo enormes beneficios para la pérdida de peso permanente.
¡No tengas miedo de verte y sentirte fuerte!
Luis Medina
